VALS DE LOS ENAMORADOS Y UNIDOS HASTA SIEMPRE
No salieron jamás
del vergel del abrazo.
Y ante el rojo rosal
de los besos rodaron.
del vergel del abrazo.
Y ante el rojo rosal
de los besos rodaron.
Huracanes quisieron
con rencor separarlos.
Y las hachas tajantes
y los rígidos rayos.
con rencor separarlos.
Y las hachas tajantes
y los rígidos rayos.
Aumentaron la tierra
de las pálidas manos.
Precipicios midieron,
por el viento impulsados
entre bocas deshechas.
Recorrieron naufragios,
cada vez más profundos
en sus cuerpos sus brazos.
de las pálidas manos.
Precipicios midieron,
por el viento impulsados
entre bocas deshechas.
Recorrieron naufragios,
cada vez más profundos
en sus cuerpos sus brazos.
Perseguidos, hundidos
por un gran desamparo
de recuerdos y lunas
de noviembres y marzos,
aventados se vieron
como polvo liviano:
aventados se vieron,
pero siempre abrazados.
por un gran desamparo
de recuerdos y lunas
de noviembres y marzos,
aventados se vieron
como polvo liviano:
aventados se vieron,
pero siempre abrazados.
Miguel Hernandez
Dedicado
a mis abuelos, especialmente a mi abuela Mercedes, que aun a pesar de sufrir
tanto en silencio y arrebatarle lo que
ella más quería, víctima de la sinrazón, mantuvo siempre viva esa llama en su
corazón hasta el final de sus días.
Recientemente
y como muchos de vosotros ya conoceis, mis abuelos permanecen ya, unidos para
siempre.
¡Feliz
Cumpleaños! abuela, allá donde estés.